Castellar de N’Hug se extiende escalonadamente alrededor de la iglesia de estilo románico, las casas siguen el estilo tradicional de piedra, y las calles están empredadas. Recorriendo sus calles nos sorprenden los escaparates de sus tiendas y pa
naderias que exhiben unos croissants gigantes que se han convertido en el símbolo de dicha población, en ningún otro lugar podréis ver unos croissants de semejantes dimensiones. Desde el pueblo se domina una gran panorámica del Parque del Cadí-Moixeró
, el espacio natural protegido más grande de Cataluña, el Pedraforca (montaña única en el mundo y emblemática donde las haya y símbolo del Parque) y los Rasos de Peguera. En el pueblo se pueden ver las ruinas del castillo y el Museo del Pastor, y muy cerca de aquí encontrareis las fuentes del Llobregat.
Para llegar a las fuentes del Llobregat, dejar el coche en un aparcamiento que hay dispuesto para ello e ir andando durante 20 minutos, además de disfrutar del entorno muy rico en vegetación hay carteles explicativos a lo largo de todo el recorrido. Cuando acaba el camino empiezan unas escaleras esculpidas en la montaña y desde las que se oye el brotar del agua. Después de unos cuantos peldaños se llega a las fuentes, a 1.300 metros de altura. Se trata de una cascada natural que en tan
solo 7 km, salva un desnivel de 450 metros. Al bajar de las fuentes se puede hacer un picnic en una zona habilitada para ello o ir a visitar el antiguo molino de harina convertido en central hidroeléctrica.
naderias que exhiben unos croissants gigantes que se han convertido en el símbolo de dicha población, en ningún otro lugar podréis ver unos croissants de semejantes dimensiones. Desde el pueblo se domina una gran panorámica del Parque del Cadí-Moixeró
, el espacio natural protegido más grande de Cataluña, el Pedraforca (montaña única en el mundo y emblemática donde las haya y símbolo del Parque) y los Rasos de Peguera. En el pueblo se pueden ver las ruinas del castillo y el Museo del Pastor, y muy cerca de aquí encontrareis las fuentes del Llobregat.
Para llegar a las fuentes del Llobregat, dejar el coche en un aparcamiento que hay dispuesto para ello e ir andando durante 20 minutos, además de disfrutar del entorno muy rico en vegetación hay carteles explicativos a lo largo de todo el recorrido. Cuando acaba el camino empiezan unas escaleras esculpidas en la montaña y desde las que se oye el brotar del agua. Después de unos cuantos peldaños se llega a las fuentes, a 1.300 metros de altura. Se trata de una cascada natural que en tan
solo 7 km, salva un desnivel de 450 metros. Al bajar de las fuentes se puede hacer un picnic en una zona habilitada para ello o ir a visitar el antiguo molino de harina convertido en central hidroeléctrica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario